10 cosas que hacer en Granada en agosto

Un castizo de la tierra, ante una pregunta parecida a esta: "oye, ¿qué se puede hacer en Granada en agosto?", respondería: "tomar mucho por culo". Lejos de adjudicar a esa expresión demasiadas connotaciones negativas, me adelanto para decir que sí, que en Granada se pueden hacer cosas en el mes de agosto, no sé si muchas o pocas, pero alguna se puede hacer.
Me declaro un fan de las ciudades de interior en verano. La vida es mejor en ellas, a pesar de los lógicos inconvenientes que encierran. A pesar de ello, son un auténtico privilegio. Venga, vamos con nuestro primer decálogo:

1. Visitar el Parque de las Ciencias. Las actividades del parque científico más importante de Andalucía y segundo de España, son muchas y muy diversas. Por un precio nada abusivo, podemos pasar un día entero disfrutando de sus exposiciones permanentes, las temporales, los talleres... Merece la pena, sin duda. Idóneos si se va con niños. Un 'pero'. Ojo porque, a pesar de que informan de que el cierre es a las 19 horas, todo se convierte en inaccesible a partir de las 18.30. No conviene relajarse.
2. Sierra Nevada. La estación de esquí es un buena alternativa para pasar un día alejado del calor del mes de agosto. Subir a 3.000 metros tiene sus ventajas. Rutas de senderismo, bicicletas de montaña, restaurantes, piscina y remontes forman un polinomio muy curioso y original.
3. Los Veranos del Corral. Actividad organizada por el ayuntamiento de la ciudad y que se desarrolla en el Corral del Carbón. Teatro y flamenco se dan la mano para poder disfrutar de alguna actividad cultural, que no todo va a ser comer y beber.
4. Lorca en el Generalife. Siguiendo con la Cultura, la Junta de Andalucía suele programar cada verano un espectáculo cultural en el teatro del Generalife, en pleno recinto de la Alhambra, con Federico García Lorca como protagonista. Este año es Eva Yerbabuena la protagonista. En caso de que no te guste el espectáculo siempre te queda la opción de deleitarte en un paisaje espectacular.
5. Ya que estamos en la Alhambra, ¿por qué no dedicar un día a visitar el recinto nazarí? Parece que ver la ciudadela de la Colina Roja es algo en lo que los granadinos no caemos en exceso, como si a los que hemos nacido entre el Genil, el Darro y el Beiro nos fueran a cobrar más. No. De eso nada. 
6. Por cierto, ya que hemos mencionado antes a Federico, podemos hacer otra cosa relacionada con él en agosto: Visitar los lugares lorquianos. Una escapada a los pueblos de la Vega que fueron sus escenarios infantiles y juveniles, es algo más que recomendable. Fuente Vaqueros, Valderrubio, el Diván del Tamarit... Pero en Granada también, la Huerta de san Vicente, la calle Angulo... o Alfacar, lugar en el que fue asesinado.
7. Sin salirnos de la Vega, pero cambiando la orientación de nuestra brújula, en la zona sur nos esperan los tradicionales merenderos de Huétor Vega, una serie de restaurantes con unas espectaculares terrazas para dejarse abrazar por el (escaso) frescor que la caída de la tarde nos regala en esa parte de la provincia.
8. No nos olvidemos de las tradicionales piscinas. La verdad es que el patrimonio piscinero de Granada es escaso, pero todavía quedan algunos paraísos que merecen la pena. Por un lado, no podemos pasar por alto el parque acuático 'Aquaola', con toboganes, cascadas, saltos y demás historietas que tanto divierten y lesionan. Por otro, en un rollo más tranquilo y familiar, os recomiendo el mesón J.R. en Belicena (Vegas del Genil). Restaurante, piscina, césped y vida ociosa.
9. Y ya que nos movemos por el medio acusoso, aunque no son mis favoritas, podemos bajar a las playas de Granada. Mis favoritas son Salobreña y La Herradura, aunque desde La Rábita hasta las inmediaciones de Nerja, hay mucho que elegir.
10. Por último: las tapas. Cómo estar en Granada y no disfrutar del tapeo local. En otro post haré otro decálogo de bares de tapas que merezcan la pena. Hoy quedaos sólo con el consejo de probar, investigar. Esto es como el clásico: busque, compare y si encuentra algo mejor, exprímalo.

Y ahora, a disfrutar de Graná en agosto. ¿Crees que falta alguna?